Falso

Estaba planchando el otro día, una de esas labores que no me gusta nada hacer pero que es necesario hacer, y a pesar de que pongo la tele o escucho la radio mientras plancho, no me gusta hacerlo, luego una se pone manos a la obra y cuando terminas piensas "no fue para tanto!", y siempre me pregunto cómo es q mi madre plancha tan bien! será que le pone más voluntad que yo, eso está claro, pero ni arruga que le queda, oye mira tú.
Bueno a lo que iba, estaba planchando, entre el montón acumulado asomaba una de las camisetas de A, una de esas que me dejó en casa, que nunca reclamó y que yo no pienso devolver, sí de acuerdo, la podría tirar a la basura, conjuntamente con otras cosas que dejó, algunas de las cuales ya me deshice de ellas, como fue un montón de mails, suyos, mensajes recibidos, conversaciones por messenger, el programa del balneario al que me invitó ... cosas que pensé que nunca tiraría y mira, llegada la hora de hacerlo no me costó un ápice desprenderme de ellas, ojalá sus recuerdos fuesen tan fácil de lanzarlos lejos y que no retonasen nunca jamás. (Voy a destrozar tu recuerdo en pedacitos de papel.Y luego voy a soplar sobre ellos para que se confundan con el cielo).
Perdón me pierdo, lo dicho estaba planchando una de esas camisetas, que tenía a la altura del corazón un dibujo pegado a modo de marca, una marca que yo no conocía, era un caballo o algo parecido, en eso estaba cuando con la punta de la plancha le dí con tanta rabia que lo levanté y despegué de la camiseta, de tal forma que se descosió y quedó al descubierto el logotipo cosido de una marca de productos químicos. En eso que pensé: "Falso hasta en ésto!, siempre mintiendo, siempre iendo de guay!" Es una tontería pero me pareció paradójico, sin más. Terminé de plancharla y la volví a doblar y guardar con cuidado, para utilizarla cuando tengo que limpiar la casa, o hacer trapos con ella.

El sol vuelve a amenazar con salir, no me importa, me gusta las horas de luz, y los días largos, pero en invierno añoro los días nublados y de lluvia, otro invierno loco.

Leyendo: La muerte lenta de Luciana B. lo acabo de empezar y como me gustó el otro libro del autor... ya os contaré qué tal